El impacto de los aranceles de Trump en China

Por Mauricio Albonico

28 de febrero de 2025, el mercado bursátil chino experimentó una caída significativa, con el índice Hang Seng de Hong Kong desplomándose un 3.6%, según posts encontrados en X, y el Shanghai Composite retrocediendo un 1.98%, de acuerdo con información reciente. Como experto en mercados financieros, puedo analizar las razones detrás de esta caída, considerando el contexto global, las dinámicas económicas internas de China y los eventos específicos que influyeron en los mercados asiáticos. Por Alan Muñoz inversionista.

La razón principal de esta caída parece estar vinculada a las tensiones comerciales renovadas entre China y Estados Unidos. Según varios posts en X, el Ministerio de Comercio de China anunció que tomaría represalias ante las nuevas amenazas arancelarias del presidente Donald Trump, quien ha intensificado su retórica proteccionista desde su regreso al poder. Estas declaraciones generaron un nerviosismo significativo entre los inversores, ya que los aranceles propuestos podrían afectar a sectores clave de la economía china, como la tecnología y la manufactura, que son fundamentales para las empresas que cotizan en Hong Kong y Shanghái. Históricamente, el mercado chino ha sido sensible a las disputas comerciales con EE.UU., y esta reacción no es nueva: en 2021, preocupaciones similares sobre desarrolladores inmobiliarios endeudados como Evergrande causaron caídas similares, según un artículo de AP News, y en 2024, las amenazas arancelarias de Trump también provocaron volatilidad, como reportó Morningstar.

Sin embargo, creo que hay factores adicionales que amplificaron esta caída. Primero, la economía china ya enfrentaba desafíos estructurales, como una confianza del consumidor debilitada y una economía que no ha recuperado los niveles prepandémicos, según un análisis de France24 (septiembre 2024). La caída del mercado inmobiliario, que históricamente ha sido un pilar del crecimiento chino, sigue siendo un lastre, con analistas señalando la falta de financiamiento y la baja confianza de los compradores, como se menciona en un artículo de J.P. Morgan Private Bank. Segundo, los datos económicos recientes no han sido alentadores: el PMI de manufactura de China ha mostrado contracción (por debajo de 50) en meses recientes, y la deflación persistente (precios a la producción cayendo desde hace un año, según World Socialist Web Site), junto con un consumo interno reprimido por políticas estrictas contra el COVID-19, agravan el panorama. Tercero, el fortalecimiento del dólar estadounidense y el aumento de los rendimientos de los bonos a 10 años en EE.UU. (hasta un 4.75%, según XTB), han limitado el apetito por mercados emergentes como China, desviando flujos de capital hacia activos más seguros.

Críticamente, el establishment chino ha intentado estabilizar los mercados con medidas como estímulos fiscales y reducción de restricciones a la compra de viviendas (J.P. Morgan), pero estas acciones no han logrado restaurar la confianza de los inversores extranjeros, que han retirado $5,500 millones de acciones chinas desde febrero de 2024 (Cinco Días). La narrativa oficial de Pekín podría argumentar que esta caída es temporal y que las medidas económicas internas contrarrestarán el impacto, pero mi análisis sugiere que la falta de claridad en las políticas económicas y el entorno político, como señala George Magnus en World Socialist Web Site, sigue generando incertidumbre. Además, la amenaza de aranceles de Trump no es solo económica; es un movimiento geopolítico que busca limitar el desarrollo tecnológico chino (World Socialist Web Site), aumentando el riesgo percibido por los inversores.

En resumen, la caída del mercado chino el viernes 28 de febrero de 2025 se debe principalmente a las tensiones comerciales con EE.UU. tras las amenazas arancelarias de Trump, pero se ve agravada por factores internos como la debilidad económica, la crisis inmobiliaria, la deflación y la falta de confianza sostenida de los inversores, tanto domésticos como extranjeros. Esta combinación de factores externos e internos ha desencadenado un episodio de volatilidad que refleja preocupaciones más profundas sobre la estabilidad económica de China en un contexto global incierto. Para más análisis sobre mercados emergentes y tecnología, puedes seguir explorando AsiaWestGo.com.

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